Vení a narrar o a leer tu cuento 2

El viernes 28 de marzo a las 18.30 dio comienzo el ciclo anual “Vení a narrar o a leer tu cuento” en Cultural Cóndor Huasi, Av. Boyacá 1400, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

Este espacio tiene el objetivo de servir como punto de encuentro para todos aquellos que honran la palabra, tanto escrita como oral. En mi carácter de anfitriona y coordinadora de este espacio, invito los últimos viernes de cada mes a todos aquellos interesados en compartir con otros un cuento de no más de cinco minutos de duración (“un poquito a cada uno no le hace mal a ninguno”) en un ambiente cálido para la escucha respetuosa.

Pueden venir a tomar un café y a escuchar cuentos, los que no conocen lo que es la narración oral (todavía) o a leer en voz alta algún relato de ustedes (poesía y aforismos no, por favor, sólo cuentos). Los narradores orales pueden “apropiarse” por un rato de alguna historia ajena y llevarla de paseo ante otros. Sólo se trata de compartir dos horas de “recreo oxigenante” rodeados de personas con gustos afines una vez al mes.

Para iniciar este ciclo, narré un cuento de tradición oral africana sobre la palabra y, después, presenté a mis invitadas sorpresa, dos señoras narradoras orales: Carmen Blanch y Betty Ferkel, del grupo Cuentos y Encuentros, quienes nos regalaron un cuento narrado “a contrapunto”, una adaptación hecha por Carmen Blanch de “Elegía para una yunta brava” de Pedro Orgambide. Luego, abrí el juego a la concurrencia y las dos horas del encuentro se nos pasaron volando, entre cuentos leídos y narrados, propios y ajenos, risas y emociones varias. Hubo de todo: empezamos con relatos sobre decapitados y acuchillados (se ve que las retenciones al agro, las manifestaciones populares, los cortes de calles y la escasez de carne vacuna en los supermercados nos pusieron mal ese día. El entorno influye en los cuentos, qué le vamos a hacer). Después vinieron historias de amores trágicos, sacerdotes enamorados de la bruma, médicos devotos y pacientes agradecidos, niños que lanzan botellas al mar para hacer amigos, Galeano, Borges, honras a las madres, hombres que no saben qué hacer ante mujeres con muchos botones desabrochados. Un surtido para todos los gustos. Como despedida, antes de desearles a todos un buen regreso a sus hogares, leí “El primer café juntos” de mi libro El exterminador de cuentos. Y así volvimos un poco más alegres y relajados a la jungla cotidiana.

Cultural Cóndor Huasi es un verdadero rincón para la creatividad. Además de narración oral y cuentos, también se puede disfrutar periódicamente de buena música (tango, blues, jazz, folclore, rock) y muestras de fotografía y de artes plásticas. Y si el arte después te da hambre (a mí sí), los amables dueños de este bar cultural ofrecen empanadas criollas, tablas, platos regionales y vinos argentinos, todo de rechupete. Una propuesta redonda para tener en cuenta en el barrio de Flores.

Los próximos encuentros del ciclo “Vení a narrar o a leer tu cuento” en Cóndor Huasi, Av. Boyacá 1400, Capital Federal, serán el 25 de abril y el 30 de mayo a las 18.30 con entrada libre y salida a la gorra, para ayudar a mantener abierto éste, tu espacio.

Informes o consultas: Gabriela Villano (loscuentosdelvillano@gmail.com ).


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